A días del inicio del nuevo año escolar, la Seremi de Salud de la Región de
O’Higgins ha intensificado las fiscalizaciones en librerías y establecimientos
comerciales que venden útiles escolares, con el objetivo de garantizar la
seguridad de los estudiantes y dar tranquilidad a los apoderados.
La acción fue liderada por la Seremi de Salud, Carolina Torres Pinto, quien
subrayó la relevancia de estas fiscalizaciones en los días previos al regreso a
clases. “Como Ministerio de Salud, estamos profundamente preocupados de
que el retorno a clases de los niños se realice en condiciones seguras. En ese
contexto, estamos realizando fiscalizaciones en la comunidad de Rancagua,
pero con despliegue a nivel regional. Queremos recordarles a los padres que
algunos útiles escolares pueden tener riesgos específicos relacionados con la
presencia de solventes o plomo en las pinturas, por lo que ponemos especial
énfasis en estos productos”, explicó Torres Pinto.
Además, hizo un llamado a los padres a tener en cuenta productos como la
silicona líquida, que no puede ser utilizada por los niños. “Este elemento, si
está en las listas de útiles escolares, debe ser eliminado. No debe encontrarse
en los productos destinados a los niños”, añadió la autoridad sanitaria.
Torres Pinto también destacó la importancia de cumplir con las regulaciones
sobre la presencia de plomo, tolueno y metanol en los productos. “Hay un
reglamento que establece los máximos permitidos de estas sustancias en los
útiles escolares. Asimismo, es importante que todos los productos cuenten con
rotulado en español, especialmente aquellos importados, ya que las
importadoras deben presentar la documentación correspondiente para cumplir
con la normativa vigente en el país”, precisó.
Por su parte, Alyson Hadad, Seremi de Educación de la Región de O’Higgins, se
refirió a la colaboración interinstitucional para velar por un retorno seguro a
clases. “Desde la Seremi de Educación estamos trabajando de manera
coordinada con la Seremi de Salud, y acompañamos esta fiscalización para
asegurar que los padres y apoderados cuiden el bienestar de sus hijos e hijas.
Es fundamental que compren en comercios establecidos y sigan las
recomendaciones entregadas por la autoridad sanitaria”, destacó Hadad.
Este tipo de inspecciones, que se realizan anualmente, tienen como propósito
verificar que los establecimientos cumplan con las normativas de seguridad. Se
recomienda a los padres que al momento de comprar útiles escolares
verifiquen que sean apropiados para la edad de los niños y que cuenten con las
etiquetas de advertencia como “úsese en ambientes ventilados” o “la
inhalación frecuente y prolongada de este producto puede generar daños
irreparables a la salud”.
En caso de emergencias, como intoxicaciones o lesiones por el uso de
productos escolares, se debe contactar al Sistema Móvil de Urgencia (Samu) al
131 o dirigirse al centro asistencial más cercano. Ante la ingesta o inhalación
de productos químicos, se recomienda llamar al Centro de Toxicología de la
Universidad Católica de Chile (Cituc) al fono 226353800.