“Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia, entonces, no es un acto, sino un hábito” – Aristóteles
Nuestro cerebro no sabe olvidar, pero si sabe sustituir y esto lo logramos cultivando hábitos, entonces para sustituir algo ya sea que te perjudique o bien tú sabes que esas actitudes más que potenciarte hacen todo lo contrario, debes comenzar a crear hábitos en tu vida y para eso requieres de un propósito, voluntad, determinación y tenacidad de que lo voy hacer, voy a lograr sustituir esas actitudes o acciones que solo me perjudican. crear un hábito requiere de una decisión personal, el empresario y orador motivacional Brian Tracy dice: “Primero hacemos nuestros hábitos, luego nuestros hábitos nos hacen” Es cierto, la reputación buena o mala que muchas veces nos formamos se crea en base de la repetición constante de ciertos patrones.
Un estudio muy interesante revelando por la Universidad de Inglaterra y la de Washington. Realizaron una encuesta a la gente preguntando si se consideraban generosos o altruista en su vida, la mayoría dijo: “No mucho” mientras que otros tanto solo respondieron: “Yo soy así, ya está y ya no voy a cambiar.” Entonces el experimento trato que durante un mes la persona de forma voluntaria iba a elegir el tratar de ser más generoso. Y se dieron cuenta que la generosidad se puede cultivar con pequeñas acciones diarias y que luego del mes las personas que de forma voluntaria accedieron a ser más generosos comenzaron a tener cambio significativo en su actitud, pudieron darse cuenta como ciertas zonas del cerebro comenzaron a activarse y que tenían correlación con un estado de bienestar psicosocial en la persona, a su vez esto producía que la persona fuera más optimista, esto significo cambios en el cerebro al fomentar y cultivar la generosidad esto los llevaba a ser personas más optimistas, estos cambios se producen en la corteza orbitofrontal (COF) es la región del lóbulo frontal del cerebro relacionada con el procesamiento cognitivo de la toma de decisiones, que también es una zona clave que nos protege de la ansiedad.
Querido a que te quiero llevar, que muchas veces necesitamos tener la determinación para tomar la decisión y dar un paso, comenzar a cultivar hábitos que nos hagan avanzar. Hay ciertos aspectos, actitudes o acciones que nos dañan y por efecto secundarios también a nuestro entorno, hay sueños y anhelos en el corazón que no pasan más allá de eso, tan solo por no generar hábitos que construyan con un ladrillo a la vez eso que tenemos dentro. La palabra “Yo soy así” es la más triste del diccionario, solo te lleva a conformarte con el proceso o la situación en la que te encuentras. Todos tenemos algo que cambiar o mejorar en algún aspecto de nuestra vida. No se trata de grandes cambios al instante, pero sí de comenzar a cultivar pequeños hábitos poco a poco día tras día que sustituya lo que queremos cambiar, como los árboles que comienza con una pequeña semilla y por el cultivo constante de ir todos los días a regar y mover la tierra, ese árbol será un gran resultado gracias a los pequeños hábitos diarios.
John Maxwell dijo: “Si los hábitos no se alinean con los sueños, entonces necesitas cambiar de hábitos o cambias mejor el sueño” Los pequeños hábitos nos llevan a grandes resultados, pero nacen de nuestra voluntad de vivir de forma intencional y de que valga la pena levantarse cada día. Los grandes atletas no se forman de un momento a otro, sino que son horas, días y años de hábitos constante que lo llevan a su éxito.
Jesús nos enseña que su reino es como una pequeña semilla pero que da un gran resultado y que esa semilla debe ser cultivada a diario, lo genial es que Jesús puso una semilla en nosotros la pregunta es ¿somos buena tierra para esa semilla? Si eres buena tierra comenzaras a cultivar con pequeños hábitos todos los días lo que hay dentro de ti, entonces ¿comenzaras a cultivar? Querido te animo a que comiences a cultivar buenos hábitos que te llevarán a grandes resultados, como el cambio de una actitud negativa, como el ser más generoso y amable, como el de lograr sueños, como el de salir de tu estado, como el de mejorar la relación con tu pareja, pero todo parte de la base de repetir y cultivar hábitos. Si tu reputación buena o mala se forma en base de la repetición ¿Qué es lo que más estas repitiendo hoy en día? ¿juega a tu favor o te perjudica?
“No debemos cansarnos de hacer el bien. Si no nos rendimos, tendremos una buena cosecha en el momento apropiado.” Gálatas 6:9
Que la era de la inmediates no le gane a lo hermoso del cultivar. Ahora toma la decisión de comenzar a cultivar esa semilla que Dios puso en ti, de la cual tú tienes las herramientas para cultivar. Entonces ¿Qué harás?
Tu amigo Nicolas Aranda. Dios te bendiga.